lunes, 18 de febrero de 2013

Memoria y futuro

La finalización de los exámenes de febrero, la apertura del segundo cuatrimestre, la presentación de las evaluaciones, y otras razones, hacen que este blog quedará para la historia. Es decir, una memoria de lo que hemos trabajado durante un cuatrimestre. Casi 10.000 visitas, más de 350 entradas recogidas de los más de 150 blogs individuales, donde aproximadamente se habrán escrito una media de 18 a 20 entradas en cada uno, es decir, de 2.700 a 3.000 entradas de todos los participantes.

Es una buena memoria del curso, aunque no la única. Tal vez impersonal, pero en cualquier caso, una memoria. Y sin memoria no se innova. Sin reconocer el pasado, sin saber de dónde proceden nuestras fuentes, sin referernciarlas y hasta sin agradecerlas, es más que probable que nuestro futuro sea incierto, pero si sabemos valorar lo que hemos hecho -sin pasarnos, pero sabiéndolo- y sabemos también lo que otros han intentado y a veces han conseguido, es más que probable que nuestras acciones de vida y de transformación de la realidad de la misma, sean más fructíferas, porque el principio de casi todo está en que muchos alguienes nos han enseñado muchas cosas, y sobre ellas, nosotros hemos ido construyendo nuestro propio proyecto. 

Una recomendación: tener un proyecto personal, un proyecto de vida, un proyecto profesional, escribirlo, remodelarlo de vez en cuando, volver sobre él, rehacer vuestro proyecto cuando sea necesario, pero siempre volver a él, sea renovado o no, pero que lo que hagáis tenga que ver con lo que queréis y con lo que pensáis. No dejaros llevar por cualquiera, ni por cualquier idea, sino que sea vuestra, que aunque sea de otros, la hagáis vuestra, poniéndola en práctica, porque finalmente las ideas valen poco, lo que realmente vale en la vida es ponerlas en marcha, hacerlas efectivas, hacerlas prácticas, y si puede ser que eso ayude a otros, porque entonces, no sólo avanzamos nosotros, sino también aquellos a quienes les afecta positivamente. 

Una referencia: para lo que queráis siempre me tendréis aquí, esperando vuestra visita. Siempre es un gran placer para un "viejo profesor" reencontrarme con mis alumnos. Por otra parte, si alguna vez tengo la posibilidad de ayudaros, no dudéis que así será. 

Un sentimiento: os echo de menos, claro que os hecho de menos. Después de cuatro meses, casi cinco, nos hemos ido conociendo, y eso significa muchas cosas para cualquiera que sea sensible a lo humano, y no como conjunto, sino casi individualmente, recuerdo muchas cosas vuestras. Y al tener conocimiento de vosotros, os echo de menos. Un abrazo muy fuerte,

Roberto Carballo

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